Nosotros

Artigiano es un sueño. Y no es un pensamiento ególatra, es realmente un sueño hecho realidad, con amigos muy queridos que se unieron para abrir una pizzería rústica en México, bajo el principio de que nuestra vida debe procurarse y disfrutarse como el trabajo de un orgulloso artesano, con aprecio por lo sencillo, por lo natural y lo fresco. Grandes han sido las aventuras y muchas las enseñanzas desde el primer día de apertura.

En Artigiano tenemos la intención de lograr que el comer pizza sea una experiencia gastronómica superior a la de la comida rápida por la calidad de nuestros alimentos, por sus ingredientes y por la forma de prepararlos.

Nuestras pizzas en Artigiano se hacen a mano, sin rodillo, y se perfuman con madera de encino en un horno de piedra. La masa se prepara el mismo día, el queso se raya de bloque y no adicionamos ningún químico, incluso nuestras especias como la albahaca y la menta se cosechan frescas de nuestras macetas.

Ofrecemos también algunos platillos complementarios de la cocina italiana para complacer los antojos de nuestros clientes, como ensaladas, pastas y postres, preparados con el mismo esmero que damos a nuestras pizzas. Para beber, servimos una limonada generosa con hierbabuena, ofrecemos vino y cerveza y por supuesto el café, que no puede faltar.

Estamos convencidos de que somos los artesanos de nuestra vida, por lo que nos esforzamos para ser considerados como un magnífico lugar para comer pizzas y pasar un buen rato.